Descubrimos cuánto nos necesitábamos hasta que nos volvimos chicles. Hacernos mejores amigas nos llenó la vida de amorts, porros, abrazos largos, escandalosas risotadas, viajes espontáneos y deliciosos tragos, pero sobre todo, de muchísimo aprendizaje y crecimiento personal. Descubrimos que juntas somos más fuertes y quisimos contarte toda la chisma.