La rana Susana es una excelente "escuchadora" y da los mejores consejos.
"Necesito..." "Scuchame..." "¿Qué puedo hacer?".
Todos siempre recurren a ella.
Pero cuando es Susana la que necesita algo...hmmm... le cuesta pedir ayuda. Por eso prefiere hacer todo sola. "Yo puedo...yo puedo...yo puedo" se repite una y otra vez.
Hasta que un día... "cof...cof" un tremendo resfriado la deja aislada en el fondo de su cuevita.
¿Será capaz Susana de pedir ayuda?
¿Serán capaces sus amigos de ayudarla?