Julia Menken lleva trabajando como experta en comportamiento en casos de asesinatos cerrados o sin resolver en la Unidad Nacional de Zoetermeer los últimos tres años. Ahora su jefe la reclama para que colabore en un caso que se prevé escabroso desde el comienzo: el horroroso asesinato de un niño de catorce años en Arnhem, cuyo cadáver han encontrado mutilado. En la escena del crimen se encuentra cara a cara con el fiscal Marteen Brouwer, quien le recuerda por qué ha estado trabajando en casos fríos todo este tiempo.