En tiempos de la inmediatez, dónde la tecnología y las nuevas formas de producción permiten la información de una nueva manera, seguimos con costumbrismos de largas jornadas laborales donde se ha normalizado el abuso del tiempo del trabajador en una ciudad que ha sobrepasado limites urbanos trasgrediendo, tiempos efectivos laborables y de traslado. Marlen, Úrsula y Alan sostienen una conversación al rededor del ambiente laboral, analizando como debería redignificarse en aras del bienestar propio como colaborador y no como empleado.