Las traductoras están cambiando el rumbo de la literatura. Su trabajo e invaluable, díficl y riguroso. Hoy tenemos el gusto de recibir a una de ellas, Charlotte Whittle, quien con su traducción de El infinito en un junto con el título Papyrus ha permitido que un libro magistral llegue a muchos más rincones del mundo. Otros de los magníficos escritores que tiene en sus traducciones son Jorge Comenza, Norah Lange y Elisa Victoria. Nacida en Utah y criada en Inglaterra, se mueve entre las dos orillas del inglés y de ahí al español. Es un gusto tenerla con nosotros.