Lo conocemos por Enriqueta, Fellini, Martincito, Olga, Madariaga, los pingüinos, los sombreros, el conejo (su alter ego) y los duendes, entre otras figuras. Lo conocemos también por su tono, su modo de hacer humor, por sus reflexiones ácidas y nostálgicas acerca de la tecnología y por su trazo único. Liniers es un creador y es un estilo; es arte, literatura, cultura y filosofía.
Su verdadero nombre es Ricardo Liniers Siri y nació en Buenos Aires, en 1973. Probó con estudiar Derecho y Publicidad, también Comunicación, pero su destino profesional lo esperaba en el dibujo, la historieta, la ilustración. Arrancó en fanzines y en diferentes publicaciones, aunque en un comienzo rechazaban su obra, demasiado enigmática: le decían que no se entendía. Poco a poco se fue abriendo paso y llegó el turno de los grandes diarios, primero Página 12 y, desde 2002, La Nación. Pero Liniers ya es mucho más que una marca registrada argentina y sus creaciones se reproducen en medios de todo el mundo. Desde hace algunos años, vive con su familia en Vermont, Estados Unidos, donde dicta clases universitarias de historieta latinoamericana.
Se cumplen veinte años de la creación de Macanudo, su universo experimental y creativo y, publicado por Penguin Random House, acaba de salir el volumen 15 de ese mundo singular pleno de creatividad, color y pensamiento. Al mismo tiempo, La Editorial Común publica por estos días El fantasma del faro, una hermosa novela gráfica de Liniers y su esposa, Angélica del Campo, que cuenta la historia de dos hermanas -una pequeña, la otra ya puber- que viajan con su padre de vacaciones y se instalan en una casa al lado de un faro en ruinas. Una novela que a la vez que recupera lo mejor de la literatura de misterio y aventuras en la infancia permite reflexionar sobre la muerte, la historia, la familia y la lealtad.
En la sección Bienvenidos, Hinde habló de “La fuga de Siberia en un trineo de renos”, de León Trotsky, con prólogo de Padura (Siglo XXI), “El despertar, de Kate Chopin”, traducción de Flavia Pittella (Mármara) y “Mitos y maravillas”, de Mariano Tenconi Blanco (Losada) y en Libros que sí recomendó “Vivir con nuestros muertos”, de Delphine Horvilleur (Asteroide) y “Juego limpio”, de Tove Jansson (compañía naviera)
En Voz Alta, Rodrigo Manigot leyó un fragmento del cuento "La suerte de Simón" de Alice Munro
Rodrigo es el cantante de la banda "Ella es tan cargosa" y acaba de publicar por La Crujía el libro "El aire del mundo" y en Mesita de luz, Débora Campos, periodista cultural, editora de la revista Ñ y docente en la UBA nos contó que libros está leyendo.