Son miles las madres migrantes que han sido deportadas de Estados Unidos y separadas de sus hijos. Algunas de ellas intentaron traer sus hijos a México, pero no encontraron condiciones para que se quedaran. Otras han preferido dejarlos en Estados Unidos porque allí tienen toda su vida, y muchas de ellas no han podido escoger. Orsetta Bellani nos cuenta las historias de Montserrat, Emma y Yolanda, quienes hoy viven en Tijuana e integran el colectivo The Dreamers’ Moms. Luchan para que las madres deportadas regresen legalmente a los Estados Unidos para poderse reencontrar con sus seres queridos e hijos.