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Becky Chambers

  • Silvia Arenashas quoted2 days ago
    Ashby, habían nacido dentro de las mismísimas naves nodrizas que habían pertenecido a los refugiados terrícolas originales. Sus espesos rizos negros y su piel ambarina eran el resultado de generaciones de cruces y mezclas a bordo de naves gigantescas. La mayoría de los humanos, ya hubieran nacido en el espacio o en colonias, compartía esa mezcla exodana desligada de cualquier nación.
  • Silvia Arenashas quoted2 days ago
    Corbin, en cambio, era inequívocamente material del sistema Sol, a pesar de que la gente de los planetas había comenzado a parecerse a los exodanos en generaciones más recientes. Con la mezcolanza que suponía la genética humana, de vez en cuando aparecían tonos más claros aquí y allá, incluso en la Armada. Pero es que Corbin era prácticamente de color rosa.
  • Silvia Arenashas quoted2 days ago
    Nunca en su vida se había preocupado por los créditos o por tener un hogar al que volver. Pero con sus últimos ahorros menguando y los puentes quemados tras ella, no había margen para el error. El precio de empezar de cero era no tener a nadie detrás si caía.
  • Silvia Arenashas quoted2 days ago
    Era tosca y angular, a excepción de la abultada cúpula que sobresalía como una espina dorsal torcida. No era una nave diseñada para pasajeros comerciales quisquillosos. No había nada elegante ni inspirador en ella. Era mayor que una nave de transporte y más pequeña que una nave de carga. La falta de alas indicaba que había sido construida en el espacio, era una nave que nunca entraría en una atmósfera. Su panza sostenía una máquina gigantesca y compleja, metálica y puntiaguda, con hileras de crestas como dientes inclinadas hacia una aguja estrecha y alargada. Ella no sabía demasiado sobre naves, pero por los colores desparejos del casco exterior parecía que secciones enteras, quizá provenientes de otras naves, habían sido remachadas unas con otras. Una nave de retales. Lo único que inspiraba confianza era que parecía recia. Era una nave que podía encajar (y había encajado) unos cuantos impactos. Aunque las naves en las que ella estaba acostumbrada a viajar eran más agradables a la vista, saber que había un casco robusto y sólido entre ella y el vacío del espacio era reconfortante.
  • Silvia Arenashas quoted2 days ago
    —¿Ese es todo tu equipaje?

    —Sí —respondió Rosemary. De hecho, cargaba con todas sus posesiones (es decir, todo lo que no había vendido). Todavía se maravillaba de haber podido meterlo todo en dos pequeños embalajes. Tras una vida en la enorme casa de sus padres, repleta de muebles, cachivaches y rarezas, saber que no necesitaba nada más de lo que podía cargar le proporcionaba un sentimiento de libertad extraordinario.
  • Silvia Arenashas quoted16 hours ago
    Aspiró aire por la pipa, provocando que las fibras troceadas chispearan y desprendieran humo. Un leve aroma a vainilla y ceniza quemada inundó la nariz de Rosemary. Pensó en su padre, que siempre estaba fumando aquello mientras trabajaba. Apartó el recuerdo indeseado de su familia.
  • Silvia Arenashas quoted16 hours ago
    Estoy segura de que ya lo sabes todo sobre las cápsulas de escape y nada sobre quién somos o qué hacemos.

    Rosemary no pudo evitar reír.

    —¿Cómo lo sabes?

    —Porque tengo que vivir con ese hombre —respondió Sissix—. Como tú. Pero, por suerte, también vas a vivir con el resto de nosotros, y creo que somos bastante agradables.
  • Silvia Arenashas quoted16 hours ago
    —¿Qué especie eres?

    —Soy un grum, y ahora soy macho.

    Rosemary no había oído hablar de los grum. Debía de ser una especie de fuera de la CG.

    —¿Ahora? —preguntó.

    —En mi especie, el sexo biológico es un estado transitorio. Comenzamos la vida como hembras, nos convertimos en machos una vez pasados nuestros años de puesta de huevos, y terminamos nuestras vidas como algo que no es ni una cosa ni la otra
  • Silvia Arenashas quoted16 hours ago
    Doctor Chef negó con la cabeza; le tembló la piel de las mejillas.

    —No me gustan los implantes que no son medicamente necesarios. Además, ¿qué sentido tiene hablar con diferentes especies si no dedicas tiempo a aprender su lenguaje? Limitarse a pensar cosas y dejar que esa pequeña caja hable por ti es como hacer trampas.
  • Beth Luriiahas quotedyesterday
    Aquellos eran los sonidos de la vida del habitante del espacio, que enfatizaban la vulnerabilidad y el distanciamiento. Eran un recordatorio de lo frágil que era estar vivo.
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