las casas encantadas ocurrían y ocurren similares fenómenos pero cuya autoría no se puede endosar a un adolescente habitante de la casa, sino a otros seres, por lo general no visibles y no vivos, es decir, a apariciones fantasma1es, a extrañas condensaciones de energía, a espíritus, a impregnaciones psíquicas de un suceso violento, etc.,