Una novela de terror basada en el odio. Y me parece que tiene sentido justificar la existencia de espíritus errantes con un sentimiento de rencor y venganza tan profundos que no te dejan irte, de este mundo o en particular de esa casa.
La novela es brillante, no solo por la forma en la que está escrita, que te mantiene curiosa de lo que vendrá, incluso a veces hasta te hace reír con algún comentario venenoso. Sino porque tiene implícita una crítica política (la represión y las "desapariciones" durante el franquismo) y social, una lucha de clases tan rencorosa que pasa de generación en generación. De ricos a pobres y de pobres a ricos.
Súper Recomendada.
Una historia poderosísima sobre la importancia de conocer tu historia familiar, porque a veces la violencia también se hereda. Fue muy fácil conectar con los personajes, no solo como mujer sino como hija de un familia compleja.
Esta novela ejemplifica la expresión muy bien la frase: "pueblo pequeño,infierno grande" y es que a veces el infierno es ser mujer en un entorno machista sin tener escapatoria alguna.
A pesar de ser una historia contada desde la rabia y el dolor, también te permite respirar una especie de justicia poética al final. Por eso, ahora será una de mis lectores favoritas.