Un regalo de amor
A Stacey Williams le encantaban los niños y viajar, así que no se lo pensó dos veces cuando el atractivo Luis Aldivista le ofreció cuidar a sus adorables gemelos en España.
Lo único que el guapísimo viudo quería era ver a sus hijos sonreír de nuevo, pero el entusiasmo que la niñera sentía por la vida era contagioso. Stacey sabía que podía hacer reír a los niños, aunque sería mucho más difícil conseguir que el melancólico Luis abriera su corazón.
A pesar de que era una empleada temporal, Luis empezó a desear que se quedara… ¡como su mujer!
Besando al jefe
A Savannah Williams le encantaba ser niñera, pero su contrato con Declan Murdock, padre divorciado, iba a suponer un gran reto. No solo su hija, Jacey, era problemática; además, Declan era su ex, al que llevaba siete solitarios años intentando olvidar.
Después de que su exesposa se aprovechara de él, Declan se había vuelto sofisticado y distante. No iba a cometer el mismo error otra vez. Sin embargo, cuando vio a Savannah de nuevo, su mundo se iluminó.
Y empezó a preguntarse si su auténtico error había sido dejarla marchar.