Mientras que la idea de que toda mujer acaba siendo madre como resultado de la naturaleza está arraigada en antiguos términos de un determinismo biológico, pensar que se acaban teniendo hijos como resultado de la propia voluntad interior se ha formado en parte por la modernidad, el capitalismo y las políticas neoliberales, que reconocen cada vez más el derecho de las mujeres a ser dueñas de su cuerpo, sus decisiones y su destino. Dado que hoy en día más mujeres disponen de un mayor acceso a la educación y el empleo remunerado, y de una mayor capacidad para decidir si tener o no una relación sentimental y con quién, cada vez hay más mujeres que son consideradas como individuos que escriben personalmente la historia de su vida: si la vida es lo que hagas con ella, si es un relato biográfico de realización personal, entonces las mujeres también son vist