La inmigración es una realidad en todo Chile. Hace más de dos décadas que mujeres, hombres y niños provenientes de América Latina, el Caribe y otras regiones del mundo, han llegado con la esperanza puesta en el trabajo que les brindemos para establecerse junto a sus familias. Los inmigrantes protagonizan los desplazamientos resultantes de la pobreza, las persecuciones o las guerras, tal como sucediera con los chilenos (as) en otros momentos de la historia. Sin embargo, su estadía en el país se complica debido al temor y a la desconfianza de algunos (as) cuando los encuentran. Producto de distintas voces, este libro muestra al racismo como una práctica basada en mitos violentamente desplegados contra quienes se considera como “los otros inferiores”, potenciando el “nosotros chileno” supuestamente superior, que tendría el derecho de explotar, humillar y hacer sufrir. El desconocimiento histórico, la incomprensión de situaciones no buscadas y el constante deseo de nación, develan cómo la clase, la etnia, la “raza” y el género, son los marcadores de un racismo que precisa ser expulsado de nuestras existencias.