la escisión es negar el goce de las mujeres en el sentido más físico del término. [...] Si se impide a las mujeres gozar, tener un orgasmo, se les impide también gozar del mundo, gozar en el sentido civil, del derecho de propiedad. Si las mujeres son en sí mismas una propiedad, no pueden ser propietarias. Lo que hay que pedir hoy es la igualdad sobre la soberanía del propio cuerpo. Si esta no se les reconoce, de nada sirve reconocerles el resto