Stephen Kenyon, Duque de Ashburton, siempre se ha tomado muy en serio las obligaciones propias de su título. Pero una noticia inesperada le lleva a alejarse de su mundo de riqueza y privilegios y emprende un viaje sin rumbo por el campo haciéndose pasar por un hombre sencillo. En su desesperado vagar conoce a Rosalind Jordan, y las esperanzas que ya creía muertas volverán a la vida desde lo más profundo de su corazón. Pero ¿cómo va a declararle el amor que siente si su existencia se ha convertido en una cuenta atrás que le atormenta noche y día, si guarda un secreto que le ha hecho huir de todo lo que hasta no hace mucho poseía? Rosalind Jordan viaja con una compañía representando obras de teatro de pueblo en pueblo. Sus orígenes son inciertos porque, huérfana de padre y madre, los Fitzgerald la adoptaron cuando niña y la han criado como a sus otros dos hijos. Ahora Rosalind se ha convertido en una joven actriz, encantadora y comprensiva que, al conocer a Stephen, sentirá que su vida cambia para siempre. Pero, ¿cómo va a entregarse a un hombre que, aunque es la encarnación de todos sus sueños de felicidad, nunca podrá ser suyo?