1973. En una fiesta en la que una mujer te dice dónde se ha comprado un par de zapatos maravillosos, dile que crees que ir de tiendas para comprar ropa es como masturbarse: todo el mundo lo hace, pero no es muy interesante y, por lo tanto, debe hacerse a solas, con vergüenza, y no debe servir de tema de conversación en las fiestas.