Ligero

En el interior del avión, mientras la luz me alcanza la nariz, pienso en los picos nevados de
las montañas en primavera.
Y escribir ahora, aquí arriba, sería como imitar
la risa de un niño.

El poema de amor sobrevive al amor.

Quiero escribir sobre esa noche en que lo perdimos todo. Aunque en realidad puede que ya
entonces nos hubiesen derrotado. Que hubiesen
ardido las naves antes de dejar el puerto.

Podríamos llamar futuro a la diferencia entre lo que
intentamos ser y lo que somos, entre lo que creemos ser y lo que verdaderamente somos. Una fórmula próxima a la decepción.

A veces lo que quiero contar es diferente de
aquello que en realidad siento