Navegadores consideran cada elemento como una caja. Una página web es en realidad un grupo de cajas agrupadas juntas siguiendo reglas determinadas. Estas reglas son establecidas por estilos provistos por los navegadores y por los diseñadores utilizando CSS.
CSS ofrece propiedades predeterminadas para sobrescribir los estilos del navegador y lograr el diseño deseado. Estas propiedades no son específicas, tienen que ser usadas en conjunto para formar reglas que luego serán usadas para agrupar las cajas y obtener la correcta organización. La combinación de estas reglas es normalmente llamada modelo o sistema de organización.