Jared Vicent era un hombre con una misión suicida. Desde que puso sus ojos en Henrietta, su nueva inquilina, se empeñó en conquistarla a toda costa, a pesar de que ella, tan hermosa como esquiva, le había dejado bien claro que no estaba interesada en él. Sin embargo, Jared prefería creer que las negativas de la joven respondían a traumas del pasado más que a un desinterés por su persona. De hecho, intuía que se sentía atraída por él y que necesitaba desesperadamente ser amada. Jared había decidido no cejar en su intento hasta que se casase con él, y ella empezaba a sentirse acosada… y feliz.