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Josefina Licitra

38 estrellas

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  • Beth Luriiahas quoted5 months ago
    ¿Es verdad que les cuesta más hablar? —pregunté entonces.

    Graciela levantó las cejas y sonrió con cansancio, o tal vez con paciencia.

    —¿Que no hablamos? Yo más bien diría que casi nadie nos preguntó —respondió.

    Después miró a la calle.
  • Beth Luriiahas quoted5 months ago
    ¿Era eso —el encierro, la cercanía de la muerte— el precio a pagar por una existencia heroica?
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    —¿Es verdad que les cuesta más hablar? —pregunté entonces.
    Graciela levantó las cejas y sonrió con cansancio, o tal vez con paciencia.
    —¿Que no hablamos? Yo más bien diría que casi nadie nos preguntó —respondió.
    Después miró a la calle.
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    “No te gastes en decirme que estás embarazada, no vas a tener un hijo, ni medio hijo, ni un cuarto de hijo”», recordó Yessie en Las Rehenas.
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    «Siendo esposa de alguien estabas a salvo, pero mujer sola y clandestina era lo peor que te puede pasar, porque eras un ser despreciable o tenías que estar dispuesta a ver con quién te ibas a acostar para sobrevivir. Fue tan duro que tuve ganas de suicidarme. Me fui a Kibón a pegarme un tiro pero no pude», dijo Cristina en el libro.
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    Mirtha Fernández Pucurull, Gricelda Borges, Nora Maneiro y Ana Casamayou, quienes no cayeron porque se exiliaron. Uruguay no era un lugar para quedarse, en esos años.
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    En ese camino, sigue Alba, te puede pasar de todo: recibir una paliza en una manifestación, ir presa, llegar al gobierno y volver a la calle al día siguiente a repartir volantes en los ómnibus. Y en el medio quizás te enamores y veas a tu hombre morir a tu lado, o tal vez te maten o te hagan daño, y ninguna de esas posibilidades echará por tierra la única certeza: que cada una de esas piezas, incluidas las terribles, forma parte de un mismo trayecto que tiene una sola perspectiva: la del horizonte. Una meta que te lleva a arrimarte dos pasos, aunque solo sea para ver que el horizonte se retira.
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    Yessie fue creciendo en el MLN y se fue distanciando de Pepe. En 1968 viajó a Cuba y dejó a Pepe en su departamento, sin imaginar que él lo usaría como base de varias acciones que no siempre terminarían bien. Al volver, un año después —enamorada de un cubano que terminaría muriendo en combate—, debió pasar a la clandestinidad porque figuraba a cargo de un inmueble fichado por la policía. Ahí entró al sector militar del MLN.
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    Los acompañaba Pepe Mujica, a quien Yessie había conocido en el rancho del Flaco. Pepe sería su primera relación amorosa seria dentro de la militancia. Y sería también su primer objetor: Pepe le reprochaba las minifaldas porque decía que eran de pequeñoburguesa. Pero Yessie las usaba igual. Eran su ropa de secretaria y le gustaban.
  • Sol Ríoshas quoted6 months ago
    Y a ella, más que pensar, le gustaba sentir.
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