La sal

cuando terminábamos de cenar, mientras los grandes hablaban de negocios, los más chicos nos íbamos hasta el farol de la esquina, que se llenaba de escarabajos. Alumbrados bajo ese cono de luz, con un palito, dábamos vuelta a los que caían al piso y los mirábamos patalear en el aire. Eso era todo, no necesitábamos nada más. No te preguntabas ni te cuestionabas nada. Eso era la felicidad. Solo que no lo sabías.

La justicia no tiene nada que ver con la maternidad. La maternidad tiene que ver con una dependencia tan real como accidental

Mamá y yo somos una ajenidad unida circunstancialmente

Yo también necesito viajar en el tiempo para entender mejor de qué estoy hecha; las familias, como las cosas, se transforman en alguna versión de lo que fueron antes

que hacer, pero no hice nada. Sara se levanta todas las mañanas y dice triunfante: “¡Qué bueno, otro día, qué alegría!”. Yo, en cambio, pienso: “Qué horror, qué horror, otro día”.

¿Y qué te hubiese gustado ser?

Nunca lo supe. No lo sé, Ema. Y basta. ¿Querés parar a tomar algo?

No paramos. Mamá puso la radio

Dije que me sentía representada en las palabras de Borges: “He cometido el peor de los pecados que un hombre puede cometer. No he sido feliz”.

Tenía una mirada nostálgica.

¿Por qué no fuiste feliz?

Por muchas pequeñas razones. Qué sé yo, tengo la sensación de que no hice nada.

Fuiste médica, tuviste dos hijas, formaste una familia...

La verdad es que nunca me animé a soltarme, siempre tuve un poco de miedo. Hice las cosas que tenía

Ella se convirtió en una de esas leonas desdentadas de los zoológicos, que no pueden dejar su jaula porque perdieron el sentido de la orientación. Lleva una vida de dientes apretados y sonrisa corta

Se la zampó el perro de la maternidad. No quedó nada de lo feliz y genial que iba a ser

—Yo estoy convencida de que hay que hacer lo menos posible. Si una se pone a arreglar todo, las cosas se desajustan después por otro lado. Pasa lo mismo con las personas

Después sí, supe que el amor está tan cerca de la crueldad que hay que estar alerta para no saltar al otro lado.