subió los escalones con furiosa seguridad. Y cuando el agua de la ducha salió helada, la dejó tal cual.
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
Su agilidad letal, su belleza…, incluso su mente
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
—Estoy convencido de que hay uno o dos escondidos en ese cuerpecito flacucho.
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
—¿Siempre insultas a las mujeres que secuestras? Una chispa de carácter. Interesante.
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
—Depende de la mujer. —¿A cuántas has traído aquí? «A ninguna». A Dev no se le daba bien compartir su espacio personal.
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
—Eso solo lo sé yo. —Secándose la cara con una toalla que había dejado en el rincón, se encaminó hacia la puerta—.
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
Mantenerse centrado le exigió toda su concentración. —Te pondremos a hacer algunos ejercicios
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
fáciles para fortalecer esos músculos. —¿Estás seguro de que tengo alguno? Aquel toque de humor fue como un puñetazo en el estómago. La miró, apartándose el pelo mo
Quetza Sanchez Marquezhas quoted8 years ago
Una parte de él deseaba protegerla, cuidar de ella, en tanto que otra, su inflexible pragmatismo, le advertía que hacer eso se le volvería en contra. Había estado a punto de besarla