La oportunidad de Deck Stryker para saldar una vieja cuenta llegó cuando la hermana de su enemigo apareció en la ciudad. Los ojos luminosos de Silver Jenssen y sus labios, que suplicaban ser probados, harían que la seducción resultara fácil, ya que la deseaba con una intensidad sin igual. Primero serían las caricias y luego culminaría su venganza. Pero no había contado con que su corazón se rindiera…