En un estado de hiperglicemia, si usted suspende la ingesta de carbodrogas, las células contarán con más tiempo para absorber y “barrer el exceso” de glicemia (proveniente del hígado) ya no empeorada por carbodrogas, muy a pesar de contar con la mitad de la reserva pancreática. Y al absorber la glucosa, el organismo recibe los nutrientes para fabricar los músculos antes “comidos” por la neoglucogénesis fuera de control (el peso perdido). ¿Es esto acaso una paradoja? ¿El que un tipo de dieta (sin carbohidratos) adelgace a unos (aquellos con obesidad y sobrepeso), y engorde a otros (aquellos que venían con glicemia elevada)? Por Dios no. No es una paradoja. Es el mismo evento fisiológico en dos estados distintos. La mayoría de quienes critican “las dietas locas” jamás las han indicado a sus pacientes. Y en consecuencia, jamás han visto, por citar otro ejemplo, a los triglicéridos corregir desde 700 mg/dl en menos de 2 meses sin medicinas. Y jamás han escuchado la sorpresa de los pacientes al descubrir que el subibaja “triglicéridos altos/toma medicinas, sácate exámenes/triglicéridos normales, suspende medicinas/repite exámenes, triglicéridos otra vez elevados/retoma medicinas”, puede ser dominado por ellos. Sin embargo, estos son los médicos, sin experiencia repito, que se dan el tupé de dictar cátedra sobre