La heredera Tish Seldon estaba convencida de que su prometido estaba locamente enamorado… pero de su fortuna. Durante el banquete de bodas decidió escapar de él y aterrizó en brazos del sheriff Zeke Thorne, que sabía que las mujeres eran problemáticas mucho antes de que Tish llegara a demostrárselo. Pero un beso poco prudente por parte de Zeke le proporcionó a Tish el primer placer de la pasión. Ella quería continuar con aquello, si es que Zeke dejaba de rechazarla…