“El gran pez se movía silenciosamente a través de las aguas nocturnas, propulsado por los rítmicos movimientos de su cola en forma de media luna…” Amity es una comunidad veraniega de la exclusiva costa de Long Island (una gran isla situada al este de Manhattan, Nueva York). Amity tiene mil residentes en invierno y diez mil durante el verano, y su economía depende completamente de los veraneantes acomodados. Una noche, una chica que nada sola en el mar es atacada por un gran tiburón blanco… Cuando se descubren los restos de su cadáver destrozado, el jefe de policía de Amity, Martin Brody, decide cerrar las playas. Pero las “fuerzas vivas” de la localidad, representadas por el alcalde Larry Vaughan, se oponen: el cierre de las playas pondría en peligro sus negocios y la propia supervivencia del pueblo. El suceso se oculta y las playas siguen abiertas… Pero el tiburón no se ha ido, y otras dos personas mueren… El joven oceanógrafo, Matt Hooper, llega a Amity para estudiar la situación… Y tal vez la única persona capaz de enfrentarse al tiburón sea un veterano y duro pescador llamado Quint.