Más oscuro («Cincuenta sombras más oscuras» contada por Christian)

SÍ.
Una simple palabra. Un significado profundo.
Un cambio de vida.
Aquí mismo. Ahora.

Que tengas un buen día en la oficina, cariño —dice a mi espalda, y aunque es algo cursi… me encanta.

Joder. Se me acelera el corazón; el bombeo de la sangre me retumba por todo el cuerpo hasta ensordecerme mientras espero su reacción. Mi bienestar pende de un hilo. Y ella dice… ¡nada! Se queda mirándome

La orquesta toma impulso y la música llena la sala con una intro elegante y sensual, y luego Nina Simone empieza a cantar «I Put a Spell on You». Te he lanzado un hechizo…
Ana se da la vuelta, armada con el batidor, y yo atrapo su mirada y se la sostengo mientras me muevo hacia ella.

Echo una última mirada a lo que una vez fue mi refugio y cierro la puerta.

Tengo la cara mojada.

Eleva lo cotidiano a la categoría de extraordinario

—Tú eres mi tabla de salvación —susurro.

Nos movemos en la luz. Nos demoramos en las sombras. Nos detenemos en la oscuridad.

—La riqueza es algo a lo que nunca he aspirado, Christian.