privada, la alianza de la caridad y del rock'n'roll reúne instantáneamente unas cantidades fabulosas; en cuanto al papa, desplaza unas multitudes inmensas en el mismo momento en que los mejores expertos diagnostican la muerte de Dios. Visto desde cerca, sin embargo, este pragmatismo se revela completamente ilusorio. Los grandes conciertos para Etiopía, por ejemplo, han subvencionado la deportación de las poblaciones que debían ayudar a alimentar. No cabe duda de que el responsable de esta malversación de fondos es el gobierno etíope, pero no importa; el estropicio podría haber sido evitado si los organizadores y los participantes de esta mundial misa solemne se hubieran permitido distraer su atención del escenario para reflexionar, aunque sólo fuera someramente, sobre