En esta segunda entrega del policía más ojete de la Ciudad de México, una letal asesina tiene a la población sumida en una ola de crímenes impensables: cada una de sus víctimas representa un lienzo de Frida Kahlo… Sin saberlo, Tris caerá en una red de traición y venganza donde él resultará ser el principal objetivo de la retorcida Cristina y su sed de sangre.