Nicholas, jefe de La división, y Melanie se conocen una noche en un bar. Entre ellos existe una gran atracción que los llevará a iniciar una relación amorosa. Pero al parecer es incompatible con los planes de La división. Deben detener como sea a la bruja Agnes, que se halla en paradero desconocido. Para ello contaran con la ayuda de una nueva división: la española.
Nicholas y Melanie guardan sus propios secretos, secretos que sin ellos saberlo los convertirán en enemigos. Cuando sean conscientes de sus respectivos roles, el mundo se les vendrá encima y tendrán que decidir entre el amor o luchar por sus convicciones.
Dos amantes enfrentados, bruja y cazador, deberán batirse en duelo en el campo de batalla donde solo existe un único desenlace posible.
Nunca la guerra había sido tan apasionante.