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Fernando Del Paso

Noticias del Imperio

  • Daniela Castillohas quotedlast month
    Pero nos dieron, Maximiliano, un trono de cactos erizado de bayonetas. Nos dieron una corona de espinas y de sombras. Nos engañaron, Maximiliano, y me engañaste tú. Nos abandonaron, Max, y me abandonaste tú. Sesenta veces trescientos sesenta y cinco días me lo he repetido, frente al espejo y frente a tu retrato, para creerlo: nunca fuimos a México, nunca regresé a Europa, nunca llegó el día de tu muerte, nunca el día en que, como ahora, aún estoy viva. Pero sesenta veces trescientos sesenta y cinco días el espejo y tu retrato me han repetido hasta el infinito que estoy loca, que estoy vieja, que tengo el corazón cubierto de costras y que el cáncer me corroe los pechos. Y mientras tanto, tú, ¿qué has hecho tú de tu vida todos estos años mientras yo he arrastrado mis guiñapos imperiales de palacio en palacio y de castillo en castillo, de Chapultepec a Miramar, de Miramar a Laeken, de Laeken a Tervueren y de Tervueren a Bouchout, qué has hecho tú sino quedarte colgado en las galerías, alto, rubio, impasible, sin que una sola arruga más empañe tu rostro ni una sola cana más blanquee tu cabello, congelado en tus treinta y cinco años como otro Cristo para siempre joven, para siempre hermoso, vestido de gala y montado en tu caballo Orispelo, y con tus grandes espuelas de Amozoc? Dime, Maximiliano, ¿qué has hecho tú de tu vida desde que moriste en Querétaro como un héroe y como un perro, pidiéndoles a tus asesinos que apuntaran al pecho y gritando Viva México, qué has hecho sino quedarte quieto en los retratos de los palacios y de los museos
  • Daniela Castillohas quotedlast month
    ¿Qué has hecho sino quedarte quieto desde entonces, para que quieta y calladamente tu barba vuelva a crecer y cubra las rojas, coaguladas medallas que compraste en el Cerro de las Campanas, qué has hecho, Maximiliano, mientras yo me he vuelto cada día más vieja y más loca? ¿Qué has hecho tú, dime, aparte de morirte en México?
  • Daniela Castillohas quotedlast month
    Pero me desperté con mis propios gritos, y tenía yo tanta hambre, Max, no sabes, después de siglos de no comer sino angustias y sobresaltos, tenía yo tanta sed, Max, después de siglos de no beber sino mis propias lágrimas, que devoré tu corazón y bebí tu sangre. Pero tu corazón y tu sangre, mi querido, mi adorado Max, estaban envenenados.
  • Daniela Castillohas quotedlast month
    Y sólo hasta entonces, con mi casa limpia y mi conciencia tranquila, me desvisto y me pongo mi camisón minúsculo y rezo mis pequeñísimas oraciones, y me acuesto en mi gran cama miniatura y bajo la almohada del tamaño de un alfiletero bordado con acantos en flor pongo tu corazón y lo escucho latir y escucho los cañonazos de la Ciudadela de Trieste y del Peñón de Gibraltar saludando a la Novara, y escucho el triquitraque del ferrocarril de Veracruz a Loma Alta y escucho las notas del Domine Salvum fac Imperatorem y escucho de nuevo la descarga de Querétaro y sueño entonces, quisiera soñar, Maximiliano, que nunca abandonamos Miramar y Lacroma, que nunca nos fuimos a México, que nos quedamos aquí, que aquí nos hicimos viejos y nos llenamos de hijos y nietos, que aquí en tu despacho azul adornado con áncoras y astrolabios te quedaste tú, escribiendo poemas sobre tus viajes futuros en el yate Ondina por el archipiélago griego y la costa de Turquía y soñando con el pájaro mecánico de Leonardo y me quedé yo, para siempre adorándote y bebiendo con mis ojos el azul del Adriático.
  • Ilsehas quoted2 months ago
    has hecho, Maximiliano, mientras yo me he vuelto cada día más vieja y más loca? ¿Qué has hecho tú, dime, aparte de morirte en México?
  • Ilsehas quoted2 months ago
    Fernando del Paso, que confiesa fundamentarse en Rodolfo Usigli, Jorge Luis Borges y Gyorgy Lukács, y trata de “conciliar todo lo verdadero que pueda tener la historia con lo exacto que pueda tener la invención”
  • Ilsehas quoted2 months ago
    Fernando del Paso
  • Ilsehas quoted2 months ago
    El nombre de Benito Juárez aparece con la fuerza de la tragedia griega. Su terquedad heroica y su patriotismo fueron las armas que acabaron con la impostura palaciega, la invasión del imperialismo y la enfermiza mentalidad ultramontana.
  • Ilsehas quoted2 months ago
    El nombre de Benito Juárez aparece con la fuerza de la tragedia griega. Su terquedad heroica y su patriotismo fueron las armas que acabaron con la impostura palaciega, la invasión del imperialismo y la enfermiza mentalidad ultramontana.
  • Ilsehas quoted2 months ago
    El nombre de Benito Juárez aparece con la fuerza de la tragedia griega. Su terquedad heroica y su patriotismo fueron las armas que acabaron con la impostura palaciega, la invasión del imperialismo y la enfermiza mentalidad ultramontana.
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