Este libro recupera una historia local de dolor y muerte en Soacha. Presenta los relatos de los familiares de las víctimas de los mal llamados “falsos positivos” y construye la memoria de las familias que no solo han sido víctimas, sino también protagonistas de la lucha simbólica y política por los significados de lo ocurrido en favor de la dignidad de sus hijos, hermanos, padres, tíos y esposos. Con este texto se busca no olvidar la barbarie y los horrores de la guerra que, presente en el país, fragmenta y violenta tanto a los jóvenes desaparecidos y asesinados, como a sus familias y a la sociedad colombiana en general. La desaparición y ejecución extrajudicial de jóvenes ocurridas desde el 2008 en este municipio aledaño a Bogotá, su posterior hallazgo como casos presentados por las fuerzas militares como bajas en combate y conocidas por el país como los “falsos positivos”, mostró lo siniestro de una práctica estatal que niega la condición y la dignidad humanas. Estos crímenes de lesa humanidad de por lo menos dieciséis jóvenes, junto con los hechos posteriores y el camino que emprendieron sus familiares para acceder a la verdad, a la justicia y a la reparación, configuran una lógica de difícil comprensión para las familias de estas víctimas, para los intervinientes de lo social y para las entidades que las atienden.