permanece ligada a algunas divinidades que reclaman y obtienen la más alta consideración intelectual, como Patria, Producción, Progreso, Ciencia. Desgraciadamente, esas divinidades tan depuradas y refinadas, totalmente abstractas, como corresponde a una época altamente civilizada, son en su mayoría de la especie antropófaga. Aman la sangre. Reclaman sacrificios humanos. Zeus era menos exigente.