Los relatos apoyan, crean y recrean convenciones que se consideran como el estado natural de las cosas sociales: gran parte del trabajo de la creación de narrativas, desde las populares a las científicas, desde las espontáneas a las premeditadas y, desde luego, todas las comerciales, financieras y políticas tratan de hacer pasar las visiones de agentes concretos por verdades absolutas independientes del sujeto que las enuncia