El bolchevismo se caracteriza por utilizar todos los medios y tácticas al servicio de la estrategia de construir el partido, movilizar a los obreros y tomar el poder. Las demás corrientes del movimiento obrero se caracterizan por lo opuesto: confundir estrategia con táctica, y elevar esta última a estrategia permanente. La historia del bolchevismo es una lucha constante por imponer los medios y las tácticas adecuadas para cada momento de la lucha de clases. El bolchevismo luchó contra los terroristas, pero supo utilizar el terror; luchó contra los sindicalistas, pero supo utilizar el trabajo sindical; luchó contra los parlamentaristas, pero supo utilizar el parlamento; luchó contra los anarquistas, pero supo destruir el estado burgués; luchó contra los guerrilleristas, pero supo hacer guerrillas; luchó contra los espontaneístas, pero supo dirigir las movilizaciones espontáneas del movimiento de masas. ¿Y para qué hizo todo eso? Para construir el partido bolchevique y movilizar a las masas hacia la toma del poder. (Nahuel Moreno)