Corrosivos: las sustancias y preparados que, en contacto con tejidos vivos, puedan ejercer una acción destructiva de los mismos.
Irritantes: las sustancias y preparados no corrosivos que, por contacto breve, prolongado o repetido con la piel o las mucosas, puedan provocar una reacción inflamatoria.
Nocivos: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o penetración cutánea, puedan provocar efectos agudos, crónicos o incluso, la muerte.
Tóxicos: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o penetración cutánea en pequeñas