Iba a reclamar a su heredero… aunque ella se resistiera con uñas y dientes.
Callie Smith lo dejó todo para cuidar de su padre alcohólico. Cuando él murió, ella pudo por fin perseguir sus sueños. Y no encontró mejor manera de celebrarlo que pasando una noche extraordinaria y llena de pasión con el atractivo príncipe italiano Luca Fabrizio.
Para mantener su dinastía familiar, Luca pensaba casarse con una esposa de conveniencia, hasta que Callie le reveló las consecuencias de su ardiente encuentro. Después de haber recuperado su libertad, Callie se negaba a llevar su anillo. Para legitimar a su heredero, Luca debió convencerla de que la vida en su cama real sería más placentera de lo que ella podía imaginar.