¡Ay, tiempo, que todo lo consumes!, dijo en ocasión cierta el poeta; y el tiempo, como el amor, la búsqueda de lo esencial del ser y del sentido de su existencia están temáticamente presentes en esta última entrega poética de Juan Andivia Gómez «Hacia donde el crepúsculo corre borrando estatuas», título que toma del poema de Neruda, con el que remata el libro y que viene a significar no necesariamente una puerta que se cierra, sino un continuum espacio-temporal en el que agita los recuerdos.