El árbol del mejor fruto. Tirso de Molina
Fragmento de la obra
Jornada primera
(Salen con máscaras Clodio, Melipo y Peloro, bandoleros, acuchillando a Constantino, de camino, y Andronio.)
Clodio: Rendíos, caballeros,
que somos cuatrocientos bandoleros.
Melipo: ¿Qué habéis de hacer tan pocos
contra tantos, si no es que venís locos?
Constantino: Yo no rindo la espada
a quien la cara trae disimulada.
Quien de ella no hace alarde,
traidor es, y el traidor siempre es cobarde;
que, en fin, entre villanos,
cuando las caras sobran, faltan manos;
y será afrenta doble
que se rinda a quien no conoce un noble;
pues ser traidor intenta
quien descubrir la cara juzga afrenta.
Peloro: ¡Mataldos, caballeros!
Constantino: Mal conocéis, villanos, los aceros
que aqueste estoque animan.
Andronio: Porque no te conocen, no te estiman.
Diles quién eres.
Constantino: Calla,
cobarde, que es honrar esta canalla
mostrar tenerlos miedo.
Cincuenta somos, y el valor que heredo,
basta.