Uno, como Alma, controla su personalidad cuádruple – los cuerpos mentales, astrales, etéreos y físicos. Los cuerpos invisibles son tan reales y sólidos en su propio plano de manifestación como lo es el cuerpo físico en este plano. El Alma es el Ego Reencarnante porque adquiere una nueva personalidad con cada nueva encarnación.