En la obra del teatrista Eugenio Barba, las relaciones usualmente indefinidas entre arte y ciencia han alcanzado una dimensión altamente valiosa, máxime si se tiene en cuenta que, a partir de sus investigaciones sobre el arte del actor y la dramaturgia de la puesta en escena, emergió una disciplina llamada antropología teatral. Esta se encarga del estudio del ser humano que utiliza su cuerpo y su mente según principios diferentes a aquellos de la vida cotidiana, en una situación de representación organizada. El objeto de conocimiento de tal disciplina será entonces el comportamiento fisiológico y sociocultural del ser humano en una situación de representación. Los espectáculos desarrollados por Eugenio Barba y su equipo del Odin Teatret han devenido procesos de creación dramatúrgica, en los que los principios y la metodología de trabajo generaron importantes aportes a la etnoescenología, permitiéndonos afirmar que, además de concebir toda una filosofía en torno al arte teatral y un discurso estético novedoso, dichas creaciones se convirtieron en productos donde gravitan aportaciones de las ciencias humanas y una interpretación del mundo a través de la escena.