La convivencia escolar, como proceso de humanización, es una meta esencial de la educación que no puede ser abarcada solo desde la normativa, ni puede reducirse al ámbito exclusivo de aula, sino que está presente en todos los espacios mediatos e inmediatos que conforman la escuela. Por ello, es útil conocer y analizar las formas de interacción que construyen la manera de “vivir juntos” que se vive en la escuela y que, a su vez, conforma una experiencia central en la formación de todos los miembros de la comunidad educativa. Tal es la propuesta el lector encontrará en este libro. De manera adicional y gracias a la profundización del análisis, se ofrece un instrumento de autodiagnóstico dirigido a las escuelas primarias.