El libro recoge estudios con una clara vocación interdisciplinar: la filosofía, la teología, las ciencias sociales y la literatura provocan intersecciones fecundas y también puntos de fuga. Razón, lenguaje y reconocimiento son las referencias para un posible diálogo donde el objeto de estudio siempre es América Latina, con sus múltiples potencialidades que logren siquiera visibilizar una historia transida de injusticias y desigualdad.