Este permanece desnudo sobre un lecho vegetal donde predomina el lawen (o laurel del sur). La variada denominación autóctona para la palabra “masaje” —ngüreun, ulürn, medkün, ngürun— revela la gran importancia de esta práctica en la medicina de la machi. La abundancia de términos que señalan la técnica terapéutica hacen de esta un factor clave dentro de la sanación ancestral que pervive en el contexto del machitún. El complejo cuadro al que se ajustan los masajes, toda su muy cuidada secuencia, la elección y predominio de determinadas partes del cuerpo (planta del pie, palmas, antebrazos), nos hacen suponer un acabado conocimiento de los centros de energía irradiantes del cuerpo humano, energías ligada al sistema nervioso y neuropsíquico, cuyo flujo se interrumpiría o empozaría a causa del mal.