Por otro lado, el ejército rebelde en que se apoyaba Cortés era realmente innumerable y corría el rumor de que Texcoco estaba por dejar la Triple Alianza y sumarse a ellos. Si Texcoco se iba de la liga que gobernaba el mundo, una buena parte de los mexicas iba a encontrar inútil su lealtad a los colhuas, y sin el sostén de Tenoxtitlan el imperio se podía desmoronar en horas.