Tras la Guerra Civil, el teatro español se encuentra en una situación similar a los demás géneros literarios. Algunos autores han muerto, otros están en el exilio y los que permanecen en España parecen paralizados para la literatura. Habrá que esperar hasta los últimos años de la década de los cuarenta para presenciar la aparición de un teatro diferente. Una fecha es fundamental en el nacimiento de este ‘nuevo’ drama: 1949, año de estreno de Historia de una escalera, de Antonio Buero Vallejo. Buero Vallejo (1916–2000) está considerado como el mejor dramaturgo español contemporáneo. Frustrada su vocación pictórica por la Guerra Civil, de la soledad, el pensamiento y la lectura afloró su vena dramática. Introvertido y de poderosa inteligencia, Buero Vallejo era un magnífico lector, alerta y profundo, a cuya curiosidad nada era ajeno. Su tema y problema es el de la desvalida criatura humana en un tiempo crítico: el hombre en busca de la libertad por caminos de conocimiento y amor. Buero Vallejo ha sabido igualar vida y pensamiento, conducta y prédica, y de su lucidez y trabajo surgió el teatro de más altura, tensión y trascendencia de la posguerra española. Historia de una escalera, ganadora del premio Lope de Vega de teatro en 1949, cuenta la convivencia diaria durante tres décadas de cuatro familias que viven en una modesta casa de vecindad. En su obra, Buero Vallejo plasma la frustración, el desasosiego y la impotencia de las clases humildes para realizar cualquier proyecto de felicidad y de mejora material a causa de factores personales y sociales. La escalera constituye un elemento simbólico, metáfora de las circunstancias adversas y del inmovilismo del sistema. Junto al tema de la fatalidad, el autor plantea el de la libertad: cada uno de los personajes es responsable del fracaso de sus sueños y proyectos, cuando con una firme acción de su voluntad hubiera podido evitarlo. Al final de la obra, el autor deja un resquicio a la esperanza: los hijos son libres para trazar su propio destino, aunque sólo si actúan con autenticidad podrán evitar repetir el mismo fracaso de sus padres.-