Dos libros en uno: Catalina y el pequeño pony y Catalina se comió todas las manzanas.
La misma niña, vista y traducida por su observador y estudioso padre. Ricardo Giuffra toma anécdotas de la infancia de su hijita, y las transforma en geniales y delirantes historias que le dan la excusa para ilustrar y ofrecer una mirada interesantísima acerca de temas que no se ven en el colegio. Como los caballos y los ponies, como la mitología griega –a la que pone al alcance de cualquier entendimiento, con colorido humor-, como las diferentes clases de caracoles y hasta las costumbres de las localidades que son escenario de la trama.
Un apasionante entretenimiento para chicos y grandes con ganas de saber y demitificar.