Cianuro para ratones es un libro tremendo: rápido, entretenido, doloroso. Sin ser un libro de terror, nos asusta. Sin ser una novela de humor, nos arranca un par de culposas carcajadas. Sin pretender ser moralista, nos deja lecciones. En su primera novela, escrita en una prosa violenta y que no da tregua, Camilo Pineda nos muestra el nacimiento de un monstruo. Pero no uno de esos con los que nos asustamos de niños, sino uno real, uno de carne y hueso, un monstruo que puede vivir cerca, que puede ser nuestro vecino, nuestro hijo o incluso nosotros mismos.