El bombero viudo Mitch Donovan estaba concentrado en trabajar duro y en construir un hogar estable para su hija pequeña. Entonces, conoció a Rory Borland. La profesora de su hija era un espíritu libre e independiente que desafiaba sus ideas sobre la paternidad y le hacía pensar en cosas que ni siquiera sabía que deseaba.
Rory adoraba a los niños. Por ese motivo, el hecho de encontrar un trabajo de profesora en San Francisco era un sueño convertido en realidad. En lo que menos pensaba era en tener una familia propia, hasta que conoció al guapísimo padre de una de sus alumnas, Miranda. Ella era su profesora, no la sustituta de su madre. Entonces, ¿qué iban a hacer con la ardiente atracción que sentían el uno por el otro?