“Parker y su esposa llegaron a Colorado únicamente con un burro. De ahí Parker, a base de trabajo duro consiguió levantar el saloon que ahora deja en herencia a su hija. Parker no quiso asociarse ni vender el local, por lo que Doris, su hija, decide regentarlo ella. Nadie confía en que pueda llevarlo sola. Demasiada competencia y malas artes en el mundo en el que se está metiendo, pero ella cree firmemente en sus posibilidades y es tozuda hasta hartar.
¿Sabe Doris a lo que se enfrenta?”